Ana Boyer, la más discreta del clan

Con una belleza que en nada desmerece a la de su madre o hermanas, la pequeña de la familia Preysler comienza a destacar en la vida social de nuestro país.

Ana Boyer, que poco a poco se ha ido introduciendo en fiestas y eventos de la mano de su madre, es cada día más ejemplo de templanza y saber estar.

Ana BoyerLejos de las excentricidades de su hermanos mayores, como el quiero y no puedo de Julio José, el eterno romance de Enrique con Anna Kournikova o la vocación eclesiástica de Tamara, Ana acaba de terminar su carrera de ADE y ya piensa en un futuro laboral en España.

Ella, probablemente lo tendrá más fácil que el resto de chicos de su promoción, por razones obvias e incuestionables. Pero también es cierto que desde ya colabora con numerosas firmas como imagen tanto nacional como internacional. Prueba de ello es su acuerdo con Porcelanosa, siguiendo la estela de su madre, que le ha permitido ser embajadora de la marca con personalidades de la talla del Príncipe Carlos de Inglaterra.

Parece que la pequeña de la saga ha heredado no sólo la belleza y savoir faire de Isabel Preysler sino también la mente pragmática y estratégica de su padre, Miguel Boyer.